FOTOGRAFÍA ETNOGRÁFICA. PROYECTO: SAN MARCOS TLAPAZOLA, EL PUEBLO DEL BARRO / Photography. Project: San Marcos Tlapazola, the village of mud.

San Marcos Tlapazola, el pueblo del barro

Apunte metodológico: El proyecto de investigación aplicada, San Marcos Tlapazola, el pueblo del barro, se desarrolló como un estudio de caso en la comunidad de San Marcos Tlapazola, Oaxaca, México, con la finalidad de identificar el trabajo cerámico que en la comunidad se desarrolla, la intención era develar el modo de trabajo de las artesanas que lo realizan, trabajo que condiciona la realidad comunitaria de esta sociedad rural, e intentar abrir nuevas vetas de expresión cerámica, pues no solo se aplicó la observación sino además se ensayó una intervención en la creación de las obras, tratando de que las artesanas produjeran otro tipo de objetos cerámicos aparte de los que tradicionalmente han creado, el resultado fue positivo, pues durante las entrevistas, las sesiones de trabajo y la documentación de la realidad comunitaria se logró que las artesanas hicieran obras diferentes, con una intención artística más allá de lo utilitario, su reacción fue positiva y hasta lograron hacer ventas con las nuevas obras. A lo largo de la muestra fotográfica se pueden notar estas intervenciones. La idea final era que las artesanas descubrieran otras posibilidades estéticas en su trabajo cerámico, cuestión que se logró, y hoy se puede constatar en la producción actual. Por razones de concreción finalmente el estudio se delimitó en la familia Martínez Aragón formada por el padre José Martínez, la madre María Aragón, las hijas Ángela (menor) y Francisca Martínez Aragón y dos hermanos migrados a los Estados Unidos.

Nota: Este proyecto etno-fotográfico contó con el apoyo de la beca de investigación aplicada otorgada por la Fundación Alfredo Harp Helú en el año 2008 por medio de la Universidad Autónoma “Benito Juárez” de Oaxaca, México.

          


Las artesanas de San Marcos Tlapazola trabajan de una forma primaria, básica y fundamental.
Sus herramientas son olotes, fragmentos de cuero, piedras rojas escogidas de entre las del río, pedazos de bule y otros utensilios por el estilo.
Su materia de trabajo la consiguen en el "banco de barro" que se encuentra al pie del cerro de la comunidad, además de una tierra especial que recolectan en la región y de la que a base de filtraciones y sedimentaciones obtienen una pintura natural que da el acabado final a sus piezas.
Trabajan a nivel de tierra y no utilizan ningún equipo técnico ni torno.
Sus piezas son modeladas sobre una piedra a la que por el uso permanente se la ha formado una concavidad, así ponen las piezas sobre un pedazo de cuero de chivo y esta gira al ritmo de las ágiles manos dando forma a las obras artísticas y artesanales.
Tampoco utilizan hornos para la "quema" (cocción) de sus piezas, simplemente a ras del suelo las rodean de leña y les prenden lumbre, controlando en su transcurso la quema, poniendo más leña y moviendo y volteando las piezas para que se "cosan" bien.
Sus obras son muy variadas, desde el básico comal de múltiples tamaños, jarras, vasos, ollas, macetas, adornos caseros y de mesa, todo tipo de vasijas, y hasta "tubos" y todas ellas son verdaderas obras de arte.
Dado que son las mujeres las que realizan este trabajo, un poco la ventura del mismo depende de cuantas mujeres conforman la familia. De forma tal que familias numerosas de mujeres, si logran organizarse, pueden desarrollar el trabajo cerámico logrando utilidades provechosas, lo que les permite una mayor producción y más posibilidades de comercialización.
Como perteneciente al distrito de Tlacolula, desde San Marcos Tlapazola se ve la ciudad prehispánica zapoteca de Yagul, en Tlapazola se habla el zapoteco y se continúa la trdición cultural de la cerámica que se practicó en las ciudades precolombinas de Dainzú, Lambityeco, Macuilxochitl, Yagul, Mitla y Monte Alban, entre otras. 
Desde esta mítica comunidad se trasladan las artesanas Tlapazoleñas para vender sus piezas en la Central de Abastos, en el mercado Benito Juárez y en otras plazas de la ciudad de Oaxaca, y todos los domingos expenden en el magistral mercado de Tlacolula de Matamoros.
Algunas han tenido la oportunidad de mostrar y vender su arte en el extranjero, gracias a que sus parientes han migrado y viven en esos lares.
Tlapazola es uno de esos mágicos rincones oaxaqueños por descubrir, no dejes de visitarlo y conocer esa gran cultura.


 San Marcos Tlapazola, the town of mud.

Methodological note: The applied research project, San Marcos Tlapazola, the village of mud, was developed as a case study in the community of San Marcos Tlapazola, Oaxaca, with the aim of identifying the ceramic work that is developed in the community, the intention was to unveil the way of working of the craftswomen who carry it out, work that conditions the community reality of this rural society, and try to open new veins of ceramic expression, The result was positive, because during the interviews, the work sessions and the documentation of the community reality, it was possible for the craftswomen to make different works, with an artistic intention beyond the utilitarian, their reaction was positive and they even managed to sell their new works. These interventions can be seen throughout the photographic exhibition. The final idea was that the craftswomen would discover other aesthetic possibilities in their ceramic work, and this was achieved, as can be seen today in their current production. For reasons of concreteness, the study was finally limited to the Martínez Aragón family, made up of father José Martínez, mother María Aragón, daughters Ángela and Francisca Martínez Aragón and two brothers who migrated to the United States.

Note: This ethno-photographic project was supported by an applied research grant awarded by the Alfredo Harp Helú Foundation in 2008 through the Autonomous University "Benito Juárez" of Oaxaca, Mexico.


The craftswomen of San Marcos Tlapazola work in a primary, basic and fundamental way.
Their tools are olotes, fragments of leather, red stones chosen from the river, pieces of bule and other similar utensils.
They obtain their working material from the "banco de barro" (clay bank) at the foot of the community's hill, as well as from a special earth that they collect in the region and from which, through filtration and sedimentation, they obtain a natural paint that gives the final finish to their pieces.
They work at ground level and do not use any technical equipment or lathe.
Their pieces are modelled on a stone that has formed a concavity due to permanent use, so they place the pieces on a piece of goat hide and this turns to the rhythm of their agile hands, giving shape to their artistic and handcrafted works.
They do not use ovens for the "burning" (baking) of their pieces, they simply surround them with firewood at ground level and light them on fire, controlling the burning as they go along, putting more firewood and moving and turning the pieces so that they are well "sewn".
Their works are very varied, from the basic comal of multiple sizes, jars, glasses, pots, flowerpots, home and table decorations, all kinds of pots, and even "tubes" and all of them are true works of art.
ince it is the women who carry out this work, the success of the work depends to some extent on the number of women in the family. In such a way that large families of women, if they manage to organise themselves, can develop the ceramic work and achieve profitable profits, which allows them greater production and more possibilities for commercialisation.
As it belongs to the district of Tlacolula, from San Marcos Tlapazola one can see the pre-Hispanic Zapotec city of Yagul. In Tlapazola, Zapotec is spoken and the cultural tradition of ceramics that was practised in the pre-Columbian cities of Dainzú, Lambityeco, Macuilxochitl, Yagul, Mitla and Monte Alban, among others, continues. 
From this mythical community, the Tlapazoleña artisans travel to sell their pieces in the Central de Abastos, in the Benito Juárez market and in other plazas in the city of Oaxaca, and every Sunday they sell in the masterful market of Tlacolula de Matamoros.
Some have had the opportunity to show and sell their art abroad, thanks to relatives who have migrated and live there.
Tlapazola is one of those magical Oaxacan corners to be discovered, be sure to visit it and get to know this great culture.

Acercamiento a San Marcos Tlapazola. 

Approach to San Marcos Tlapazola.












































FAMILIA MARTÍNEZ ARAGÓN 

Martínez Aragón Family

EL PROCESO DE CREACIÓN ARTÍSTICA

The process of artistic creation

   



                           

























LA QUEMA DE LAS OBRAS

The burning of the works 































LAS OBRAS Y EL INTENTO 

DE INTERVENCIÓN ARTÍSTICA

 The works and the attempt at artistic intervention













LA VENDIMIA

The harvest

    









MUJERES EN SAN MARCOS TLAPAZOLA

Woman in San Marcos Tlapazola






























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